El director de Cáritas Diocesana de Valencia invita a Juniors M.D. a involucrarse en la entidad

“Qué bueno sería que cuando los Educadores acabarais vuestra etapa en Juniors llamarais a la puerta de Cáritas”, les dijo Nacho Grande

 

Una treintena de Educadores y Educadoras participaron el pasado miércoles 9 de noviembre en la sesión de Espais Socials dedicada a esta institución de la Iglesia

 

Cáritas Diocesana de Valencia es, para el director de esta organización, Nacho Grande, “la caricia de la Iglesia”. Con estas palabras definió el sentido del trabajo que realizan alrededor de 5.500 voluntarios y voluntarias en 425 parroquias para que 46.500 personas puedan vivir mejor en un momento que definió como “dramático”. Grande compartió su visión sobre la labor de Cáritas con los Educadores y las Educadoras que participaron el pasado miércoles 9 de noviembre por la tarde en la primera sesión de este curso del programa Espais Socials, en el que se plantean temas de actualidad para que la juventud se formen en torno a cuestiones de actualidad y se implique en acciones de voluntariado.

“Debemos seguir esta línea de mostrar al Movimiento la realidad de los más desfavorecidos, porque en ocasiones vivimos en una burbuja y desconocemos lo duro que puede llegar a ser para muchas familias el hecho de carecer de la estabilidad económica que nos permite desarrollarnos como personas”, afirma la Secretaria Diocesana de Acción Social y Caritativa, Marta Silvestre. “El resultado fue muy bueno porque logramos reunirnos bastante gente para escuchar cómo y por qué debemos comprometernos. Creo que Nacho Grande, al que le agradezco enormemente que nos hiciera un hueco en su apretada agenda para estar en el Espais Socials, logró motivarnos para comenzar a buscar la forma de colaborar desde los Centros”, comenta.

En la convocatoria, que llevaba por título ‘Somos lo que damos. Somos amor’, el coordinador de la institución en la Archidiócesis de Valencia animó a la treintena de asistentes a la conferencia a involucrarse en los proyectos que tienen en marcha. “Qué bueno sería que cuando acabarais vuestra etapa en el Movimiento llamarais a la puerta de Cáritas. Os necesitamos. No para sustituir a las personas mayores, sino para que haya un equilibrio intergeneracional, para que podamos complementarnos: la madurez y la experiencia de las personas veteranas frente al sentido de pertenencia de la juventud. Es un trabajo conjunto. Termina nuestra etapa en Juniors y, ¿qué hacemos? ¿Seguimos con nuestra vida o continuamos con nuestro compromiso y con todo lo que hemos estado transmitiendo en los Centros a través de los Principios de Vida Juniors?”, se preguntó. “Ojalá esa inercia, ojalá que el paso de Juniors a Cáritas fuera normal en unos años, porque trabajamos en la misma sintonía”, asegura.

El 14% de los que tienen trabajo son pobres

Para animar a la participación, comentó algunos datos, entre los que destacó que el 14% de las personas que tienen trabajo son pobres y que esa cifra se espera que aumente próximamente. “Es un drama. La clase media está desapareciendo y están emergiendo otros tipos de pobrezas, como la soledad no deseada, los suicidios entre menores de edad, las adicciones cada vez más tempranas y la falta de trabajo”, enumeró. En su opinión, “podemos mirar a otro lado, podemos criminalizar desde el desconocimiento y el prejuicio y pensar que por mucho que hagamos todo seguirá igual. Estamos llamados a entregarnos como respuesta que se desprende de nuestra fe”.

Respecto a los jóvenes, resaltó que están creciendo la brecha digital, las enfermedades psicológicas y psiquiátricas, los problemas emocionales y la falta de un ocio en el que se sientan queridos, protegidos y cuidados. “Es importante que la gente encuentre en Cáritas un espacio sanador, algo que vosotros también hacéis en Juniors. Se les cuida en todas sus dimensiones, no solo en la económica. Y no se prejuzga ni se pregunta su origen. ¿Por qué no lo fortalecemos?”, se pregunta.

Proyectos Juniors-Cáritas

En el turno de preguntas plantearon dudas acerca de cómo comenzar a colaborar con Cáritas, sobre lo que Nacho Grande les comentó que lo primero es conocerse. Después se ha de intentar aprender de los agentes de pastoral e invitar al Centro Juniors a integrantes de la entidad para que difundan su labor y así explorar posibles campañas de concienciación. Asimismo, se compartieron actividades conjuntas ya en marcha en algunas parroquias.

“Vivimos en una sociedad frágil. No podemos mirar a otro lado. La pobreza se hereda, se transmite y se cronifica. Tenemos que ser parte activa en la reconstrucción de las sociedades heridas. De nuestras acciones depende la vida de los que tenemos a nuestro alrededor, porque somos interdependientes. Su bienestar depende de cómo entendamos nuestra manera de vivir, consumir y entregarnos a los demás”, concluyó.