El Movimiento Juniors tiene en las misiones una alternativa para la solidaridad y la evangelización

El programa ‘Espais Socials’ dedicó su sesión del miércoles 6 de marzo a dar a conocer la labor de Manos Unidas y la Delegación de Misiones de la Diócesis

 

La conferencia, en la que participaron Pedro Juan Luengo y D. Arturo García, está disponible en el canal oficial de Juniors Moviment Diocesà en Youtube

 

Más allá de nuestras parroquias, barrios y ciudades hay muchas personas que no tienen sus necesidades básicas cubiertas. En muchos países los niveles de pobreza son muy altos y para intentar paliar esas carencias hay muchas asociaciones trabajando, entre las que se encuentran Manos Unidas y las diferentes Delegaciones de Misiones de las Diócesis de todo el mundo. Dos representantes de estas dos organizaciones se acercaron el pasado miércoles 6 de marzo hasta la Sede Diocesana de Juniors M.D. para participar en la sesión de Espais Socials que se dedicó al voluntariado internacional y las misiones.

La Delegación de Misiones “es una tarea que nos encarga el Arzobispo para que animemos la misión en la Diócesis. Somos católicos, pero si no saliéramos a anunciar a Cristo en todo el mundo seríamos una Iglesia nacional o regional. Tenemos que animar a todas las parroquias a promover la dimensión misionera”. De esta forma resume D. Arturo García, Delegado de Misiones de la Archidiócesis de Valencia, la labor que realiza el área que coordina.

Esta tarea se gestiona a través de Obras Misionales Pontificias (OMP), que está presente en un total de 1.124 territorios del planeta, “ese tercio de la Iglesia mundial cuya vida y labor aún dependen de ayudas externas, tanto económicas como personales y espirituales”. Y para contribuir a ese objetivo, la Delegación de Misiones se encarga del trabajo directo de sensibilización y cooperación misionera entre las comunidades cristianas y ante toda la sociedad.

Como recordó D. Arturo García en su intervención, “los donativos entregados a OMP en Jornadas del Domund, Infancia Misionera y Vocaciones Nativas o de cualquier otro momento llegan de las Diócesis a la Dirección Nacional, que los envía al Fondo Universal de Solidaridad. Desde ahí se distribuyen en función de las posibilidades y se atienden las necesidades de los 1.124 territorios de misión, garantizando una distribución equitativa y justa”.

Juniors e Infancia Misionera

El 2º domingo del tiempo ordinario de cada año se celebra la Jornada de la Infancia Misionera para “alentar el espíritu misionero y la solidaridad mutua” entre los pequeños de todo el mundo. La colecta de esta jornada ayuda a sostener numerosos proyectos evangelizadores y asistenciales en favor de los niños de los territorios de misión.

El deseo de D. Arturo es que desde Juniors M.D. se asuma como algo propio el proyecto de Infancia Misionera. “Es algo que cuesta y hay que ver cómo se hace”, resalta. Para lograr una mayor involucración, propone que los Centros dediquen colectas a ello, que difundan lo que se hace y que participen en las iniciativas que se llevan a cabo a lo largo del año.

La misión, “cuanto más la conoces más te implicas, más te gusta”, afirma el sacerdote, quien reconoce que ir a una misión requiere tiempo y dinero. “Pero, si lo pensamos, a veces nos gastamos dinero en cosas que no hacen tanta falta. A veces te compras ropa y luego no la gastas tanto o haces un viaje a la Riviera Maya. Pues ese dinero te lo ahorras. ¿Cómo va a ser la misma experiencia la de la Riviera Maya, que es como si fueras a Benidorm, que la experiencia de un mes en misiones ayudando a la gente? Te cambia la vida”, afirma convencido.

Manos Unidas

Manos Unidas realiza proyectos a demanda de los misioneros o instituciones religiosas que están en contacto con determinadas realidades sociales con necesidades, todas en países del sud.  Cuenta con 6.500 voluntarios y 72 delegaciones en España. De todas las personas involucradas en su actividad, solo cobran de la organización 144, “porque se necesitan especialistas en distintos ramos”. El resto son colaboradores que dedican su tiempo, como dice Pedro Juan Luengo, coordinador del Área de Sensibilización de Manos Unidas en Valencia, “por un salario emocional”.

Impulsada en 1959 por un grupo de mujeres de Acción Católica, sus objetivos son luchar contra el hambre, la malnutrición, la pobreza, las enfermedades, el subdesarrollo y la falta de formación, así como trabajar para erradicar sus causas. Sus valores están alineados con el Evangelio y la Doctrina Social de la Iglesia.

Sensibilización y financiación

Para promover la participación, cada año Manos Unidas propone una campaña, que arranca la segunda semana de febrero. Ese fin de semana lo recogido en las colectas de las eucaristías se destina a la entidad. ‘El efecto ser humano’, es el título de la campaña de este 2024, con la que se quiere destacar que “el único animal que es capaz de modificar profundamente las diferencias tan grandes que hay entre las personas es el ser humano”. Además, se envía material educativo a los colegios y se convoca el Festival de Clipmetrajes, una propuesta con la que se invita a la gente a enviar videos de un minuto de duración cuyo contenido esté relacionado con el lema de la campaña.

Respecto a los recursos económicos, los obtiene con las cuotas de los socios, que son la principal fuente de ingresos, la recaudación de la colecta anual, las Cenas del Hambre y las actividades deportivas y culturales, a lo que hay que añadir los donativos recogidos por el merchandising.

Tras explicar que la actividad de la organización se centra en temas relacionados con la salud, la educación, la agricultura, la formación y la promoción social y de la mujer, Pedro Juan Luengo recordó que en 2023 se pusieron en marcha casi 300 proyectos, que se sumaron a los que ya estaban en funcionamiento, por lo que el total ascendió a 700.

El ponente les propuso a los Educadores y las Educadoras interesarse por Manos Unidas, algo que puede hacerse a través del nuevo departamento de jóvenes de la ONG de desarrollo.

Una vida digna

“Los fondos de Manos Unidas y de OMP provienen, sobre todo, de los donativos que realizan particulares, por lo que, como dijeron ambos ponentes, la misión también se lleva a cabo en nuestro entorno, planteando iniciativas para recaudar el dinero que posteriormente se utilizará para que en los países necesitados puedan disfrutar de una vida digna”, señala la Secretaria Diocesana de Acción Social y Caritativa, Marta Silvestre.

“Como cuentan todos los que han tenido la oportunidad de participar sobre el terreno en alguno de los proyectos que se realizan en países subdesarrollados o en vías de desarrollo, vivir un voluntariado de este tipo es una experiencia muy enriquecedora que marca para siempre y nos puede ayudar a mantener la energía para seguir transformando el mundo. Por eso queríamos que los Educadores y las Educadoras conocieran en qué consisten estas actividades, por si quieren profundizar en ellas y planteárselo de cara al futuro”, explica Marta Silvestre.

La sesión de Espais Socials, que estuvo presentada por la Tesorera Diocesana, Soraya Moreno, está disponible en el canal oficial de Juniors Moviment Diocesà en Youtube.

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